Excelso placer

 Convoca a los medios,
véndeles la moto,
que sea otro quien pague
los platos rotos.
 Asuntos muy serios,
dinero de todos
política es fraude
inútil el voto.
 La calle agoniza,
acciones en alza,
conciencia hecha trizas
en una balanza.
 Trucados los pesos
quien gana es el amo,
carencias y excesos
tragedia de esclavos.
 ¿Me das de comer?
te muerdo la mano,
excelso placer
joder al tirano.

Lumpen

 No puedo ser clase obrera
porque no tengo trabajo,
¿pa qué sirve una bandera?,
pertenezco a lo más bajo.
 Tú quieres tomar el poder,
yo deseo aniquilarlo,
no te falta de comer
y yo apenas puedo robarlo.
 Las consignas no alimentan
más que ilusiones vacías
cuando aquel que las proyecta
dice mucho y hace poco,
rebeliones de opereta
pan nuestro de cada día
lucha, sé humilde, respeta,
no intentes comerme el coco.

¿Servidor o sirviente?

¿Para qué sirven los ojos
en la oscuridad perpetua?
 ¿Para qué sirve escuchar
si ni siquiera se molestan
en oírte?
 ¿Para qué sirve encontrar
otra pregunta sin respuesta?
¿Para qué sirve pensar
si sólo lleva a consumirte?
 ¿Para qué sirve decir
que ya has ido y estás de vuelta,
y no te apetece volver
pues no ha servido de nada?
 ¿Para qué sirve servir
ser el tornillo o la tuerca...
y no ser cizalla o martillo
que logre arrancar la alambrada?

La mordaza

 Revienta los resortes
del sistema que te oprime
da igual cómo te comportes,
hasta pensar es un crimen.
Se pueden llevar los millones
y luego en tu cara reírse,
mandar a los de uniforme
es más sencillo que oírte.
 Las cárceles siguen llenas
de pobres y de desgraciados,
¿el por qué de sus condenas?
no tener pa un abogado.
 La calle bulle en problemas,
los despachos son sagrados,
silencio es la estratagema
que sostiene este tinglado.
 La censura permanente
que nos tiene sometidos
se infiltra muy sutilmente
por métodos ya conocidos.
 Omitiendo lo importante,
desviando la atención
hacia un hecho irrelevante,
desactivando la acción.
 Puedes golpear las paredes,
puedes tener tu opinión,
que la tele y los papeles
les rendirán sumisión
al corrupto, al ignorante,
al poderoso y al traidor,
no se debe hacer desplantes
a quien ostenta el control.