miércoles, 30 de marzo de 2011

Luces azules

Las cuatro de la mañana
de un miércoles de marzo,
me asomo a la ventana
a ver si me fumo un cigarro.
Oigo voces en la calle
y veo la luz de un portal
una pareja discute
de forma no muy normal.
El hombre la agarra del cuello
y le reprocha a bofetadas,
ella llora arrinconada
yo grito: ¡déjala en paz!.
El hombre sigue insistiendo,
y dice que le da igual
que aparezcan los maderos
o toda la guardia real.
Cojo el móvil, marco un número,
y no me hacen esperar,
tras tres o cuatro minutos
se acerca la nacional.
Cinco coches, tres secretas,
y otros tantos de uniforme
buscan la puerta correcta
que les rellene el informe.
Unas vecinas se asoman
por detrás de una persiana,
un policía interroga
pero ellas no saben nada.
Preguntan puerta por puerta
y el silencio es la respuesta,
habitan pared con pared
demonios de sonrisa apuesta.
¿Cuántas de ellas perecieron?
¿Cuántas más perecerán?
aunque ahora esté tan mal visto,
el miedo duerme en su cama
y es difícil de parar.

viernes, 25 de marzo de 2011

Condenados

Me eleva hasta la estratosfera,
después me deja caer,
me vacía, me supera,
mas no me hará enmudecer.
Como aplacar el dolor
ahondando profundo en la herida,
algunos siembran rencor,
yo recojo despedidas.
Kilómetros de distancia
entre deseo y apatía
kilómetros que hoy son nada,
las prisas, esperas valdías.
Un hilo de plata en el pecho
que nos aferra a la vida,
un hilo frágil y estrecho
que mostramos a escondidas.
Ninguna causa es perdida
si entre todos la encontramos,
si desterramos la envidia
y perdonamos como hermanos.
Pues somos seres humanos,
con todo lo que ello conlleva
amamos, sufrimos y erramos,
disfrutemos la condena.

lunes, 21 de marzo de 2011

Bélico

Cambian bombas por dinero
y luego se atreven a hablar de paz,
da igual quién pegue primero
son los mismo hijos de puta pero con diferente disfraz.
Bendita OTAN salvadora de civiles indefensos,
formada por hordas y hordas
de infelices de uniforme
y a darle al gatillo propensos.
No nos defienden,
y nunca nos han defendido,
parece que sólo entienden
de lo mala que es la guerra
cuando se ven impedidos.
Cuando pierden una pierna
y les pagan con medallas
la hipocresía es eterna
existe allí donde vayas.
Queda bien ir de pacificadores,
pero han sido proveedores
de miseria, plomo y hambre.
Los de arriba no pelean,
nunca han oído el mortero
regando la tierra de sangre.
Fotos con viudas y entierros,
porque ellos no son los culpables.
Ellos no emplean las armas,
sólo las han vendido
y cuando todo está en llamas
reclaman su merecido.
Todos somos los vencidos
cuando las balas hablan,
los cuerpos yacen podridos
y sólo perdura la rabia.

Cotidiano

A veces parece que vivo en otra dimensión,
donde toda la gente que me rodea son meros figurantes,
el actor protagonista lo encarna la frustración,
el odio como antagonista, los mismos errores de antes.
Podría extenderme contando los ciegos que me he pillado,
podría extirparme el dolor y servírtelo en un plato,
podría describir cada olor de aquellas que me besaron,
pero hoy no tengo humor pa buscar tres pies al gato.
Me encuentro tirado en la cama fumándome un porro a escondidas,
fuera llueve, es madrugada y mi abuela está dormida,
mi madre se ha despertado, y me dice: "vaya horas",
salí de fiesta y volví y ahora divago a solas.
Más grande se hace esa bola
que entorpece mis sentidos
remordimientos que estorban
y que frenan el olvido.
Objetivo primordial: pasar desapercibido,
buscar en lo insustancial
perversos juegos prohibidos.

martes, 15 de marzo de 2011

Desolación

Creció como una ortiga
en mitad de un descampado,
lo mutilan, lo fumigan
y aún así sigue brotando.
Una puerta que se cierra,
te vas y yo desolado
hoy libro una nueva guerra
conmigo mismo y en vano.
No puedo evitar lo que siento,
aunque no estés a mi lado
fingir feliz y contento,
fingir que todo ha pasado.
Fingiendo me hiero aún más,
me desespero y desangro,
mis versos intentan volar
y extirpar mi desencanto.
Mi amor no fue suficiente
y de mí tú te has cansado,
recuérdame sonriente
recuerdos son algo lejano.
No sé amar de otra manera,
pues a amar nunca se aprende,
se muere de amor si es preciso,
y nadie te enseña, se siente.
Punto, coma, impasse o inciso,
inciertos días en ciernes,
se terminó de improviso
y cómo jode lo que pierdes.

miércoles, 9 de marzo de 2011

Incongruente

Se me escapan tantas cosas
que no hay tiempo de cogerlas
unas feas, otras hermosas,
más efímeras que eternas.
Me vuelvo a encontrar de nuevo
en un cruce de caminos
donde nadie me ha indicado
cuál de ellos es mi destino.
Si ya no hay vuelta atrás,
¿qué hacemos vagando en círculos?
Si nunca nos conocimos
¿de qué sirven nuestros vínculos?
Despierto en mitad de la noche
y el silencio se hace música,
tan sólo son cuatro acordes
de canciones que hoy son únicas.
En un ejercicio inherente
de olvidar lo cotidiano,
lanzo versos incoherentes
explosivos cual butano.

Crudo

Estalla una revolución
en un remoto lugar del planeta,
derrocan a un dictador
y también caen las caretas.
Aquel que era recibido
con altos honores de Estado,
ahora sólo es un bandido,
voraz, despiadado tirano.
Mientras hay gente que muere
miramos en nuestras carteras,
que el precio del crudo despegue
sería una muerte certera.
"Expandir la democracia,
extender la libertad",
mantener su idiosincrasia
de mentiras por moral.
Cómete tu capital,
tu solidaridad de pega,
tu estado de bienestar
Y tus intrigas palaciegas.
Cómete hasta tus bombas
y tu armamento pesado,
porque ya no queda nada
tu avaricia lo ha arrasado.
Hipocresía imperante,
su ejército son los periódicos
voceros de gobernantes,
lo importante es anecdótico.
Crecer hasta que no queden
ni sitios donde perderse,
teorías caducas que hieden
a fascismo prepotente.
No basta con alzar la voz
en estos tiempos que corren,
no basta con decir no
y esperar que todo explote.
Da igual que te toque de lleno,
de espaldas o de rebote,
pues bienviven a tu costa
y así siempre salen a flote.