jueves, 28 de junio de 2018

Inminente

Sueños líquidos
se cuelan por el sumidero,
arrecia el desasosiego
de un fugaz recuerdo nítido.
la distancia inicia el duelo
la espera mantiene en vilo
mi búsqueda a ras de suelo
y solo es otro intento tímido.
Absorto,
pero no muerto
sigo vivo (o eso creo)
Me las veo y me las deseo
por mantener la ilusión.
Tocar fondo,
alzar el vuelo,
las dos caras de este juego,
lo que siento es lo que muestro,
mi calvario, mi pasión.

Histrión


Nace una ilusión
que rezuma esperanza,
surge un impedimento
entre acción e intención.
Las ganas que le pongas
inclinan la balanza,
a un lado están los miedos
y al otro está el amor.
Puedes tomarlo a risa,
puedes hasta hacer chanza,
la vida va deprisa,
lo dejo a tu elección.
Si los remordimientos
dibujan en tu cara
arrugas de tristeza
cultiva el buen humor.
Me río hasta de mí
para aguantar la farsa
que implica el existir
aún sin hallar razón.
Trato de compartir
aquello que me llena
revirtiendo el problema,
haciéndolo canción.

Temperamental

Como arenas movedizas,
como lluvia torrencial,
me envuelve y me aterroriza
esta ficción que es real.
Como echar sal en la herida
y beber agua de mar,
cómo jode una partida
si no hay ganas de marchar.
Como viento huracanado,
como desierto glaciar,
el dolor viste de blanco
y arrasa hasta congelar
todo aquello que antes era
amor y sinceridad,
para tornarse en miseria
y en perpetuo malestar.
Enfrentarse a unos demonios
invisibles hasta dar
con los muros de este agobio
y los achaques de la edad.
Se convierte en un incordio
el simple hecho de pensar
que lo que provoca este insomnio
es lo que me ayuda a avanzar.