No persigo la perfección
pues es algo artificial,
algo tan insustancial
que no merece atención.
Persigo poder transmitir
aunque sólo sea una idea,
me la pela transgredir
y me la sopla que me creas.
Menguo como la luna,
crezco como la marea,
a hostias despejo mis dudas
en esta eterna pelea.
La inspiración no aparece,
no va a estar ni se le espera,
a saber dónde se mete,
prefiero abrir mi vereda.
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