miércoles, 16 de junio de 2010

Pesimismo

Un buen día, la vida te cambia para siempre,
como si te asestasen un puñetazo certero,
las palabras son confusas, las miradas nunca mienten,
caminando entre la lluvia cambié junios por eneros.
Déjame seguir pensando que esto puede cambiar,
mis ideas y sentimientos son lo único que tengo,
son algo etéreo y voluble que nadie me puede quitar,
me enseñan a dónde voy me muestran de dónde vengo.
No existen impedimentos
cuando los versos se tornan castillos inespugnables,
el momento por futuro, poesía por testamento,
la herejía de pensar que la verdad no es maleable.
Todo atado y bien atado,
las dos patéticas caras,
explotador y explotado
tengas o no tengas ganas.
La esperanza peina canas
y los niños sólo quieren ser mayores,
nunca hubo tiempos mejores...
ni los habrá mañana.

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