martes, 7 de agosto de 2012

Todas

Tu pelo rubio como el trigo en verano,
tus ojos de ámbar, tus labios de miel,
caricias de seda que me traen tus manos,
mañanas de cama en colchón sin somier.
Tu cara, dormida y desnuda a mi vera,
tu risa atrevida, tus curvas, tu piel,
tus silencios cómplices de noches en vela,
la espera impaciente por volverte a ver.
Da igual una noche, que cinco o diez años,
os he amado a todas con todo mi ser,
juro que lo siento si os he hecho algún daño,
juro que lo siento, lo sufro y lo sé.
A oscuras naufrago en recuerdos perpetuos
de lo que hice mal, del cómo y por qué,
han causado estragos tu olor y tus besos,
han causado estragos, yo me lo busqué.
No encuentro consuelo en los buenos momentos,
que ya se han pasado y no van a volver,
pero no hay remedio, cura, ni escarmiento,
pa este incauto iluso adicto a querer.

No hay comentarios:

Publicar un comentario