sábado, 30 de noviembre de 2013

Temores cotidianos

 Lo poco que recuerdo es que dolía,
amnesia selectiva es anestesia en ciertos casos,
a las puertas del infierno vi a la muerte y sonreía,
"dejemos que sufran en vida y recojamos los pedazos".
 Lo poco que recuerdo es que sentía
caer a plomo en un abismo de reproches despiadados,
un pitido repelente, una luz que se movía,
señores con batas blancas y tubos clavaos en los brazos.
 Pesadillas recurrentes,
tan tristes como reales,
mecanismos inherentes
de temores cotidianos.
 Dejar que muera o se sane
o, mejor, cortar por lo sano,
sentir el miembro que falta
después de años enterrado.
 Hoy, padecer ya no basta,
los intereses se esconden tras una mano tendida,
muchos acatan la orden, unos pocos los que mandan,
la mayor de las derrotas, dar la causa por perdida.


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