Creer en el dinero te convierte en despreciable,
creer en el Estado, en un ser autoritario,
creer lo que dice la tele, en una opinión maleable,
creer siempre es lo primero pa bailarle el agua al amo.
"Los anti-disturbios son currantes"
se esmeran en estamparte la cara contra el cemento,
"Aquí la cosa ha cambiado, ya no estamos como antes"
pero la violencia viene de los mismos estamentos.
Mucha sangre derramada,
mucha rabia, muchos muertos
y sigue sin pasar nada,
y, si pasa, va muy lento.
No sueltes tu parrafada,
me aburrirá, lo presiento,
teoría a marchas forzadas,
la acción no se lleva por dentro.
La percepción establecida mutila mi libertad,
me imponen ser comprensivo con quien me quiere matar,
con el poli consentido es inmoral ser imparcial,
y si ya no entiendes esto es que te han hecho luz de gas...
o sientes que formas parte de algún cuerpo represivo
y justificas que ataquen sin sentido y sin motivo
a quienes no les queda más que sus voces y gargantas
para poder protestar...
las heridas ya no achantan.
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