nos abocan al fracaso en busca del mal menor,
fulminan nuestros derechos pa que suban sus acciones,
nunca quedan satisfechos, la codicia es su razón.
Viven en un mundo donde todo es apariencia,
donde el pobre nace pobre y más pobre morirá,
si una postura incomoda, se malea o se silencia,
la desgracia es un negocio pa invertir su capital.
¿Esperas que sonría mientras veo cómo aplastas
aquello que me servía para vivir dignamente?
¿Esperas que me doblegue por un poco de tu pasta
para así cerrar mi boca y dejarte acaparar?
No aspiro a tener posesiones, no aspiro a tu dolce far niente,
no creo en tus soluciones de avaricia y falsedad.
No vendo mi voluntad, ni reprimo lo que siento,
aunque pague caro el precio en salud y en soledad.
Aunque me encuentre silencios, seguiré gritando siempre
contra el rico, contra el fuerte y contra toda autoridad.